Según “Correo Semanal”, la ropa le baila a César Álvarez y no es para menos, pues este 16 de mayo cumplirá un año preso, tras ser acusado de ser el autor intelectual del crimen del exconsejero regional de Áncash Ezequiel Nolasco en marzo del 2014.

“Me trajeron aquí para que no hable, pero ya es hora”, dice al conceder su primera entrevista oficial desde que fue apresado.

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“Estoy preso por orden del presidente Ollanta Humala”, arguye Álvarez. “Humala ha olvidado que yo colaboré intensamente en la campaña política que lo llevó a Palacio de Gobierno. Lo apoyé con logística y con muchas cosas más. El nexo entre ambos fue mi amigo Martín Belaunde Lossio”, sostiene.

Según Álvarez, Martín Belaunde Lossio volvió a buscarlo en el año 2010 para proponerle ayudarle en la campaña de reelección. “Con su productora televisiva, él trazó un plan piloto para demostrar que era un buen publicista”, afirma.

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Fue así como el exasesor de Ollanta Humala montó una sucursal de su empresa Ilios Producciones en la calle Los Pinos 600, en Chimbote, para ‘apoyar’ a Álvarez. Ese local es conocido por las autoridades como “La Centralita”.

Sin embargo, Álvarez niega que ese local, haya funcionado una central de espionaje, pero afirma que el trabajo de Martín Belaunde Lossio fue “tan bueno” que logró ser reelegido en el 2011. “No me cobró nada, era un apoyo por pura amistad”, agregó.

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Álvarez también remarcó que no ordenó matar a Ezequiel Nolasco y que el sicario que lo acusó del crimen ha expresado reiteradas veces ante el juez del caso que él fue torturado en la Policía para que declare en su contra.

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