Suspender de manera unilateral Tía María hubiera sido un “pésimo precedente” para la estabilidad jurídica, dijo el jefe del Consejo de Ministros, Pedro Cateriano, quien confirmó que la empresa Southern dispuso una pausa del proyecto y remarcó que el mensaje presidencial reafirmó la convicción democrática del Gobierno, su respeto a la ley y el Estado de Derecho.

“Al ingresar al Congreso de la República he sido informado de manera preliminar que la empresa acepta una pausa para que en un plazo razonable este proyecto pueda ser discutido técnicamente”, manifestó ante el pleno del Parlamento, donde reafirmó que “en democracia los problemas que existen se deben solucionar sin el uso de la violencia”.

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En su presentación, indicó que al Perú le costó mucho esfuerzo consolidar una estabilidad jurídica y política, que ha permitido la atracción de la inversión, parte fundamental no solo para la generación de la riqueza, sino para el progreso de todos los peruanos.

Señaló, en ese sentido, que una eventual suspensión unilateral del proyecto no solo privaba al país de 1,400 millones de dólares en inversiones, sino también afectaba su credibilidad exterior ante los inversiones, y la frustración de una política de Estado.

“Fácil hubiera sido para el Gobierno dejar de lado el problema y decir el proyecto queda suspendido, pero debemos tener una visión de estado”, afirmó.

Prueba de que el Gobierno ha actuado con responsabilidad, dijo, es que los beneficios de Tía María no los gozará la gestión actual sino la próxima administración, pues la mina recién empezará a producir en el año 2017.

“Tenemos el compromiso de respetar los pactos, de honrar la palabra comprometida, es algo fundamental y es una señal de confianza a los mercados nacionales e internacionales. Esa es una razón de peso para haber sostenido que el Estado no puede detener unilateralmente el proyecto Tía María”, insistió.

Fuente: Andina

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