La fiscal de lavado de activos, Marita Barreto, atribuyó a Benedicto Jiménez ser el brazo derecho del empresario Rodolfo Orellana y responsable de la intimidación en contra de quienes investigaban a esta compleja organización.

Refirió que el coronel en retiro era “el brazo derecho” de la organización, quien, “con violencia física y psicológica”, logró proteger el desarrollo de este grupo encabezado por el empresario Orellana.

Dijo también que Jiménez realizaba acciones de intimidación contra las autoridades que investigaban las acciones de esta organización, y que existe peligro de fuga por cuanto no se presentó a las citaciones durante el proceso.

La fiscal solicitó ampliar a 18 meses la detención preventiva contra Benedicto Jiménez, el prófugo empresario Rodolfo Orellana y los demás miembros de esta organización.

“La organización es tan compleja que no podemos individualizar al autor del delito como lo haríamos en un caso de robo agravado o en un asesinato u homicidio, aquí la organización trabajaba de manera concertada, cada uno asume un rol y una función”, explicó.

Fuente: Andina