El periodista Álvaro Vargas Llosa escribió en su blog sobre la “difícil situación” que atraviesa el pueblo peruano, tras las recientes declaraciones y actitudes del presidente de la República, Ollanta Humala.

¿Prepara Humala el terreno para sumarse al club de populistas que llegaron al poder por la vía electoral y mudaron de ropajes?, se preguntó.

“Muchos peruanos creen que el Presidente Humala ha renunciado a su compromiso de respetar la democracia y el Estado de Derecho, y de ceñir sus políticas de inclusión social dentro del amplio corset del modelo económico vigente”, escribió.

Vargas Llosa señala que hasta “la elección ornitológica y fraudulenta” de Nicolás Maduro en Venezuela, la relación entre Humala y los peruanos iba bien y las encuestas “reflejaban ese apoyo transversal”.

“Esta percepción cambió cuando, con el pretexto de presidir temporalmente Unasur, un bloque regional dominado por aliados del chavismo, Humala invitó a Lima a los mandatarios correspondientes, incluido Maduro, para convalidar la farisaica elección de este último. Luego viajó a Caracas para acompañarlo en su toma de posesión”, prosiguió.

“No sería honrado negar que Humala les ha dado esta vez muchas razones para el miedo. Aunque confío en que la fuerte reacción de muchos peruanos lo habrá asustado y en que las encuestas pronto le quiten el mareo, hay demasiadas ambigüedades en su discurso y ambivalencias en su actuación como para sentirse seguros”.

Por tanto, pidió “en lugar de hacer conjeturas (¿será o no dictador, será o no su mujer candidata ilegal?), es más útil que los peruanos opongan resistencia al menor síntoma de populismo y autoritarismo para que la respuesta a esas preguntas no agarre a nadie dormido. Empezando por la estatización de la industria de los combustibles”.