Ursula Southeil, quien sería conocida en la posteridad como la madre Shipton, nació en julio de 1488, en pleno reinado del famoso rey Enrique VIII, en una cueva ubicada en la localidad de Knaresborough, Yorkshire, Inglaterra.

Ella predijo la disolución de la Iglesia Católica en tiempos de Enrique VIII, la caída del cardenal Wolsey, la prematura muerte del hijo de Enrique Eduardo VI, el sangriento reinado de “Bloody” María I, el ascenso de la reina Isabel en el trono de Inglaterra, la llegada de la terrible plaga a Londres en 1665 (“la muerte triunfante cabalga a través de Londres”, escribió la hermana Shipton en un verso), y el dantesco incendio del año siguiente en la misma ciudad; la derrota de la armada española y la llegada al trono inglés de la reina Victoria, entre otros hechos históricos.

En estas líneas, por ejemplo, parece que la profetisa parece anticipar el nacimiento de los automóviles y el auge de algunas actuales aplicaciones de Internet como Twitter y Facebook:

“Los carruajes andarán sin caballos y los accidentes llenarán al mundo de dolor. Los pensamientos volarán alrededor de la tierra en un abrir y cerrar de ojos. Qué extraño y, sin embargo, se harán realidad”.

Otro vaticinio de la vidente inglesa parece anticipar el nacimiento del cine, la incorporación de los aviones y los submarinos a la guerra moderna y la temida llegada de la II Guerra Mundial:

“Cuando pinturas parezcan ser vivas y libremente movibles, cuando los barcos como peces naden bajo el mar, cuando los hombres como las aves crucen los cielos, entonces la mitad del mundo bañado en sangre perecerá”.

La madre Shipton también anticipó en sus profecías el nuevo rol que jugaría la mujer en el tiempo presente, ya emancipada de su tradicional rol de esposa, madre y dueña de casa, además de referirse al auge de la convivencia entre parejas, el aumento de los divorcios y la disminución de los nacimientos y las cifras demográficas:

“En esos asombrosos y lejanos días, las mujeres adoptarán el deseo de vestir como hombres, y usarán pantalones y cortarán sus melenas y cabellos. Cabalgarán a horcajadas con la frente de bronce, como lo hacen las brujas en nuestros tiempos, El amor cesará y ya no se casarán y los pueblos disminuirán al disminuir los bebés”.

Profecías por cumplirse

La vidente parece referirse al creciente poder actual que ostentan las dos grandes potencias del lado oriental del mundo: China y Rusia, además de la llegada de una especie de plaga o enfermedad.

“Los hombres amarillos ganarán gran poder del oso poderoso, a quien ellos ayudarán. Estos tiranos no tendrán éxito en dividir el mundo en dos, mas de estos actos nacerá un gran peligro. Y una fiebre intermitente dejará muchos muertos”.

Sin embargo, una de las profecías más aterradoras formuladas por la Madre Shipton tienen que ver con el desencadenamiento de la Tercera Guerra Mundial.

“Ay, ay, La guerra vendrá de donde mora el turco y el pagano que en feroz riña se enfrascarán buscando como aniquilar sus vidas. Cuando el norte divida al sur y en las fauces del león el águila anide, entonces el impuesto, la sangre y la guerra

“Cuando el hombre se aproxime al último siglo, tres montañas que duermen unirán su respiración y lanzarán hielos, llamas y muerte. Los terremotos engullirán ciudades y los mares subirán e inundarán regiones costeras”.