Los arqueólogos hallaron los restos de una niña que se encontraba sepultada mirando hacia abajo. Este descubrimiento en la región de Liguria generó especulaciones en la prensa local que bautizó el caso como el de “la niña bruja”.

Aún no se ha determinado el período aproximado en el que habría muerto la adolescente de unos 13 años, pero se sabe que la iglesia donde fue encontrada habría sido construida entre los siglos V y VI D.C. y que fue abandonada en el año 1593, informó Discovery News.

Con respecto a la insólita posición en que fue encontrado el cadáver de la niña, la antropóloga Elena Dellú, explicó que “en particular, el entierro boca abajo estaba relacionado a que el alma dejaba el cuerpo a través de la boca. Enterrar al muerto boca abajo era una forma de prevenir que el alma impura amenazara a los vivos”.

El investigador Stefano Roascio coincidió con que enterrar un cadáver boca abajo, en la antigüedad, era visto como “un acto de castigo”. “En estos casos, las acciones del muerto eran consideradas profanas o no eran aceptadas por la comunidad. Otras investigaciones, en todo caso, han encontrado casos más extremos, encontrando restos de personas con ladrillos en la boca, clavadas al suelo o incluso decapitadas”, especialmente las que eran acusadas de brujería, vampirismo u otras prácticas diabólicas.

Los arqueólogos aventuraron una teoría para explicar el motivo por el que la adolescente habría sido “rechazada” por su comunidad. Un análisis de los restos permitió encontrar hiperostosis porótica en el cráneo, lo que es una señal de anemia.

“La niña podría haber sufrido de una enfermedad hereditaria, o condiciones de hemorragia o simplemente haber tenido una dieta con poco hierro. Estas condiciones podrían haberle dado una apariencia pálida, con varios hematomas, asustando a la comunidad, lo que podría haber motivado su entierro boca abajo”, explicó la antropóloga Elena Dellú.

Fuente: Guioteca