Las personas que trabajan en empleos sedentarios durante diez años tienen el doble de posibilidades de sufrir un cáncer de intestino. Lo peor es que no se salvan ni aquellos que van al gimnasio y realizan ejercicios con regularidad, si después se pasan la jornada sentados, según un reciente estudio.

Los resultados de la investigación, publicados por el ‘American Journal of Epidemiology’, dejó al descubierto los peligros de los modelos de trabajo de la vida moderna, en los que la mayoría de los empleos obliga a mantenerse sentado durante muchas horas al día.

Según Telecinco.es, la investigación coincide con otros estudios, que vinculan la aparición del tumor de próstata en hombres que realizan trabajos sedentarios.

Esta reciente investigación realizada en una universidad de Australia subraya que las personas con largos periodos de inactividad física durante el día tienen un riesgo mayor de sufrir cáncer intestinal, según publica el ‘Daily Mail’.

Los investigadores australianos siguieron a 918 enfermos de cáncer en el intestino y lo compararon con 1.021 voluntarios sanos. Se indagó sobre los patrones de trabajo, historia laboral, estilos de vida y alimentación.

Los investigadores encontraron que los trabajadores sedentarios tienen un 44 por ciento de probabilidades de sufrir un cáncer de este tipo. “Incluso un nivel alto de actividad física no modificó el efecto de un trabajo sedentario”.