IDL-Reporteros presentó una serie de audios de las negociaciones entre los remanentes de Sendero Luminoso y los representantes de las compañías vinculadas con el consorcio Camisea, tras el secuestro de 36 trabajadores.

Pocas horas después del rapto de los empleados de Skanska y Construcciones Modulares (que pertenece a la compañía Ransa, del Grupo Romero), hubo el primer contacto radial.

Los interlocutores fueron un senderista y un funcionario de acento extranjero apodado ’Adrián’. El terrorista le indicó que Arístides Cruz Condori (el chofer que fue liberado poco después) sería enviado a Kiteni con “unos requerimientos”.

El segundo contacto tuvo lugar el martes, a través de uno de los trabajadores secuestrados, Abraham Valle. Ellos pidieron a Skanska que sus “requerimientos” (dinero y material explosivo) debían ser enviados en un helicóptero piloteado por un civil. No se concretó.

El jueves 12 de abril la negociación fue retomada por un enojado senderista, que se presentó como representante de Abraham Valle, y un nuevo interlocutor de las empresas que se identificó como ’Luis’.

Mientras el senderista le exigía al vocero de Skanska y Construcciones Modulares que atiendan sus demandas porque de lo contrario todo terminaría “con sangre”, ’Luis’ insistió en conversar con alguno de los rehenes para garantizar que estuvieran con vida.

“¿Van a cumplir o no van a cumplir? Si ustedes quieren terminar en sangre no hay ningún problema”, advirtió. No obstante, ambos acordaron retomar la comunicación a las 5 y 30 de la tarde, pero no hubo respuesta alguna de los subversivos.

El viernes 13 los senderistas abrieron la comunicación y pusieron a Abraham Valle como interlocutor de ‘Luis’. Este empieza la conversación con preguntas para confirmar si se trataba del verdadero Valle, quien consideró inviable la negociación y que recibió un número de celular para futuras comunicaciones.

Después de esta conversación no se registró otra comunicación radial. Al parecer, las negociaciones continuaron por teléfono celular. Al día siguiente, el sábado 14 a las 4 de la madrugada, todos los trabajadores de Camisea fueron liberados.