Julie Chambers descubrió que un estafador había creado una página en

Facebook con el nombre de su hija fallecida, Zoe, pidiendo donaciones para, en teoría, ayudar a financiar un trasplante de corazón para la pequeña.

El estafador, proveniente de Jamaica, utilizaba además imágenes robadas de la red social de Julie, quien vive en Inglaterra.

Esta persona, según descubrió por sus propios medios Chambers, creó una página en Facebook con el nombre y la imagen de su hija – que murió cuando tenía apenas dos años después de recibir un transplante que no pudo solucionar sus problemas cardíacos – y había recibido alrededor de 200.000 visitas y, según parece, habría recaudados miles de euros al remitir las peticiones de ayuda a una cuenta bancaria propia.

Con esta información, Chambers quiso denunciar el caso a la policía, pero los agentes le aseguraron que no podían hacer nada porque en el fraude no se había cometido contra ella.

Fuente: Contexto.com.ar