Medio millar de católicos peruanos y bolivianos, entre ellos la embajadora de Perú, Silvia Alfaro, reverenció el último domingo por las calles del centro de La Paz, Bolivia, al Señor de los Milagros.

Los devotos del Señor Cristo Morado pasearon, al son de boleros de cabellería interpretados por la banda de guerra de la Policía Nacional del Perú, con base en Puno, el anda de la imagen del Cristo de Pachacamilla, por la misma Plaza de Armas de La Paz.

Se trata de la VIII procesión del Señor de Los Milagros que partió de la parroquia de La Merced, bajo custodia de la orden mercedaria de Perú.

Tras una liturgia, la procesión llegó hasta el Palacio Consistorial de La Paz y luego, tras discurrir enfrente del Legislativo boliviano, retornó a la parroquia erguida a finales del siglo XVIII.

La procesión, que reunió a funcionarios de la legación diplomática peruana fue organizada por la Hermandad del Señor de Los Milagros La Paz, perteneciente a la Asociación de Peruanos, informó el hermano Wilfredo Córdova.