Las autoridades de Nueva Zelanda declararon muertas a las nueve personas, entre ellas una maestra peruana, que permanecían desaparecidas tras el terremoto de 6,3 grados que sacudió la localidad de Christchurch el 22 de febrero pasado.

Los muertos son cuatro ciudadanos chinos, un ruso, un filipino y dos neozelandeses, además de la peruana Elsa Torres de Frood, de 53 años, residente en Nueva Zelanda y directora de la escuela de enseñanza de lengua King’s Education.

Con la declaración de este lunes, la cifra definitiva de víctimas mortales del terremoto asciende a 181.

La última vez que se vio con vida a Torres de Frood fue tres minutos antes del temblor en el interior de la construcción y, aunque no se ha identificado su ADN entre los restos hallados, se encontraron sus llaves del coche y su anillo de boda entre los escombros.