es una fotógrafa de perros ancianos de Estados Unidos que cree que la dignidad, sabiduría y amor incondicional de los viejos canes debería ser homenajeada.

Hoy, ella viaja por diversos estados tomando fotos de perros mayores y compartiendo sus historias con el mundo.

Todo inició cuando dos perros de Le Vine, Lulu y Maxie, murieron en el año 2006.

Siendo una fotógrafa, ella no podía pensar en una mejor manera de honrar la memoria de sus mascotas que coger su cámara y comenzar a capturar imágenes de perritos ancianos.

Para entender mejor la relación entre la neoyorquina Le Vine y los perros mayores, es necesario saber lo que dice acerca de Babe, uno de los canes que ella fotografió.

“Babe fue mi mejor amigo. Un alma muy, muy vieja. Nunca necesitó una cadena… (ella) inició mi pasión por mirar más profundamente a los ojos de un perro con mi cámara”, dijo Le Vine.

Mientras que varios de los amados perros de Le Vine ya no están, su cálida memoria y bellas fotografías hablan sobre la marca profunda que esas mascotas dejaron en la vida de sus dueños.

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