En Nueva York, la zona de Lower East Side experimentó en la década del 90 la llegada de un grupo de marginados que se instalaron en sus edificios abandonados. Punks, alcohólicos y fugitivos convivieron y fueron retratados por la fotógrafa Ash Thayer.

Las imágenes, compiladas en el libro titulado “Kill City: Lower East Side Squatters 1992-2000”, revelan el submundo bohemio que se creó entre esos bloques abandonados y por los parias que, con lo poco que tenían, lograron establecer un peculiar hogar.

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Es un vestigio además de una forma de vestir, una manera de comportarse, un estilo de vida que poco a poco fue desvaneciéndose con el cambio de década. Ahora esos bloques ubicados en Manhattan han elevado sus precios, albergan restaurantes finos y departamentos tipo estudio que valen dos mil dólares al mes.

Fuente: Daily Mail.

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