Ana Catarina Bezerra es contadora y sufre una enfermedad muy rara, la compulsión orgásmica. Esta dolencia es fruto de una alteración química en el córtex cerebral, lo que provoca que la mujer esté continuamente buscando orgasmos como modo de aliviar su estado de ansiedad.

Según el diario brasileño Região Noroeste, la mujer de 36 años, divorciada y madre de 3 niños, llegó a masturbarse hasta 47 veces al día.

“Fue en ese momento cuando pedí ayuda. Comencé a sospechar que esto no era normal”, dijo.

El médico Carlos Howert trata a Ana Catarina desde hace tres años y le receta un “cocktail” de ansiolíticos para recudir sus niveles de ansiedad. De esta forma, solo neceista masturbarse 18 veces por dia.

Hace una semanas semanas, en abril, esta mujer ganó una batalla judicial que le otorga el derecho a masturbarse en su lugar de trabajo y a acceder a través del ordenador de la empresa a imágenes eróticas.