Con la llegada de la globalización las marcas han aumentado increíblemente sus ventas, tanto así como también han proliferado las imitaciones ilegales en di versas partes del orbe.

Es así como el resultado de este fenómeno mundial ha provocado que muy pocos sean los productos que no han sido falsificados.

Ejemplo de lo anterior es que hasta las marcas más caras y prestigiosas del mundo han visto cómo han perdido clientes, y también dólares, por culpa de los falsificadores.

Empresas como Adidas, Sony y hasta una marca de whisky son las que en este caso han sido falsificadas, imitaciones burdas que hasta llegan a dar risa de lo mal que quedaron.

Fuente: Guioteca.com