La escuela dirigida por las religiosas peruanas de la Orden de las Trinitarias, ubicada en la zona denominada Orquídeas, fue visitada una vez más en lo que va del año por el personal del Consulado peruano en Guayaquil.

La ocasión fue propicia para llevar a cabo un ágape navideño y conocer el estado en que se encontraban nuestras connacionales y el monasterio, ubicado en la colina denominada “Cerro Colorado”, tras el incendio que destruyó el 60% de la vegetación del referido lugar, informó la Cancillería.

La donación, consistente en atún y guisantes, fue posible gracias al concurso de amigos benefactores, en este caso, de una distinguida familia peruana de nuestra comunidad guayaquileña.

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