Una de estas ciudades fue París, la capital de Francia, donde aún se conservan algunos restos de lo que una vez fue la Exposition Coloniale, en la que se expusieron a los visitantes estos seres humanos.

En el último rincón del Bosque de Vincennes de París, se encuentran los restos de lo que una vez fue una exposición pública para promover el colonialismo francés inaugurada hace más de 100 años y lo que se puede calificar hoy en día como el equivalente a un ‘zoológico humano’, donde se observaba a personas de otras razas y etnias en un entorno que imitaba el hábitat del que procedían.

En 1907 se construyeron seis pueblos diferentes en el Jardin d’Agronomie Tropicale, que representaban a todos los rincones del imperio colonial francés de la época: Madagascar, Indochina, Sudán, Congo, Túnez y Marruecos.

Los pueblos y sus pabellones fueron construidos para recrear la vida y la cultura tal y como era en su hábitat original. Esto incluía imitar la arquitectura, se importación productos agrícolas y terriblemente, se habitaron las réplicas de las casas y poblados con gente llevada a París desde las remotas colonias.

Los habitantes humanos de la ‘exposición’ fueron observados por más de un millón de curiosos visitantes desde mayo hasta octubre de 1907, cuando terminó. Se estimó que entre 1870 hasta la década de 1930, más de un millón y medio de personas visitaron varias exposiciones repartidas por todo el mundo en las que se exhibían habitantes humanos.

Fuente: Husmeandoporlared.com