Una empresa británica ha propuesto bikinis con relleno para niñas de 8 años. La idea ha acarreado las críticas de los psicólogos pero la firma se ha negado a sacar la prenda de su catálogo de verano.

La idea la ha tenido la firma británica Abercrombie & Fitch. Se trata de un modelo de bikini en dos colores que bautizan como “Ashley push-up triangle”, o sea, un bikini con relleno, para crear la impresión de que hay más pecho del que hay. Lo extraño de la iniciativa es que está dirigida a niñas de 8 a 14 años, según recoge el diario Daily Mail.

“Es algo tremendo ha criticado la doctora Janet Rose, experta en relaciones entre padres e hijos, si un padre compra un bikini con relleno a una niña de 8 años habría que llamar a los servicios sociales. Ya es bastante grave la “sexualización” de los adolescentes como para que ahora tenga como objeto niños más pequeños”.

Esta opinión la comparte la psicóloga californiana Nancy Irwin que asegura que ponerle un bikini con relleno a una niña de ocho años es como “animar la precocidad y la promiscuidad sexual”. Un colega suyo va más allá y dice que con un comportamiento así las madres “usan a sus hijas para compensar su falta de atractivo sexual”.

La firma ya había levantado polémica al vender una línea de lencería poco adaptada para niñas de esa franja de edad, y también en aquella ocasión se negó a dejarla de vender.