Una mujer de 52 años, en Holanda, tenía ideas completamente fuera de la realidad: Veía a cada instante dragones en las personas. Por tal motivo, se dirigió a un hospital psiquiátrico de La Haya.

Ella declaró que las alucinaciones no sólo se efectuaban cuando miraba a la gente, sino que hubo momentos en que en medio de la oscuridad o sobre algún objeto inanimado, aparecía el ser.

Los visiones incluían específicamente rostros de color negro y alargados, orejas puntiagudas, un gran hocico y la piel similar a la de un reptil, informó ABC.es.

Los especialistas quedaron impactados, tanto así que no tenían un plan específico para abordar el curioso caso.

De hecho, los exámenes a los cuales fue sometida no revelaron mayores problemas psiquiátricos. El propio desconocimiento del equipo médico hizo que el síntoma fuese bautizado como Prosopometamorphopsia.

Sin embargo, los doctores decidieron, ante la desesperación de la paciente, iniciar un tratamiento a base de rivastigmina, fármaco destinado a solucionar trastornos mentales que afectan la vida cotidiana, lo cual permitió disminuir en parte las apariciones en la vida de la mujer.

Los científicos aún desconocen detalles sobre el posible origen de la patología, pero continúan investigando el hecho.

Fuente: 24horas.cl/ABC.es