“Error humano”, así lo llamó el Presidente al naufragio ocurrido tras confirmarse la mala maniobra del comandante del crucero Costa Concordia, Francesco Schettino; que afectó a cerca de 3,200 pasajeros, y los mil miembros de la tripulación.

Foschi y el Director General, Gianni Onorato, se presentaron en una concurrida conferencia de prensa que comenzó a las 11.45 de la mañana (hora italiana) para luego terminar una hora después, en la sede de Génova, donde, además, afirmó que “la tragedia es de enormes proporciones y aún está en marcha”.

En estas horas los náufragos y los miembros de la tripulación están siendo repatriados mientras los restos del naufragio siguen siendo monitoreados para asegurar que no se mueva; sin embargo, la preocupación es fuerte por una eventual tormenta. De hecho a bordo de la nave – aún inclinada hacia un lado – se encuentran 2,300 toneladas de combustible que amenazan al Archipielago Toscano.

“Hemos cuantificado 93 millones de dólares en daños directos, costos adicionales todavía no se han cuantificado” afirmo Foschi.

Lo que sí es cierto es que en la tripulación laboraban 45 peruanos, asumidos por temporadas, al parecer ninguno de ellos residente en Italia, de los cuales, según los diarios italianos, un tripulante peruano habría fallecido.

“Estamos en constante comunicación con la Embajada Peruana – concluye el Presidente Foschi -. Hay que tener presente que existen todavía personas desaparecidas entre la tripulación y los clientes que se encontraban a bordo”.

Por: Doménica Canchano, especial para Peru.com.