La exmodelo coreana Hang Mioku, de 48 años, quedó desfigurada al inyectarse silicona y aceite de cocina, lo que le dejó la cara deformada y llena de cicatrices.

A los 28 años tuvo su primera cirugía plástica. Pasó 20 veces por el quirófano, pero disconforme con los resultados del bisturí, se aplicó ella misma el producto en su rostro.

Su aparición en televisión generó que miles de televidentes donaran dinero para pagar la cirugía correctiva de la exmodelo.