Un hombre de Stockport, un pueblo de Gran Manchester al noroeste de Inglaterra, confesó su adicción a la Coca-Cola Light a tal punto que esta bebida gaseosa ha llegado a controlar su vida, y los médicos temen por su salud.

Se trata de Darren Jones, de 38 años, que admite que no pueden pasar 24 horas sin tomar Coca-Cola Light y reconoce que ha llegando a beber hasta 18 latas al día, lo que equivale a 42 litros por semana, a un costo de 3.000 dólares al año.

Su adicción ha ido empeorando a tal grado que acepta que no puede salir de casa sin una lata de la citada bebida, publicó el diario ‘Daily Mail’.

El hombre no se muestra sorprendido al reconocer que en los últimos diez años se ha podido tomar el líquido equivalente a 65.700 latas, sin que hasta el momento le haya ocasionado problemas de salud.

Aunque él dice no sentir síntomas de enfermedad, algunos expertos manifiestan todo lo contrario, al indicar que las bebidas dietéticas tienen edulcorantes artificiales y contienen cafeína “suficientes para causar daños en el organismo”.