Al parecer no está arrepentido. El docente Lenin Camacho Palacios señaló que no incurrió en ninguna falta cuando participó de una fiesta donde bailó y bebió licor con sus alumnos de cuarto año de secundaria.

“No he cometido nada”, dijo al ser interceptado por los iracundos padres de familia, quienes a empujones trataron de evitar su ingreso al colegio San Francisco de Asís.

“Ustedes quieren un profesor santo, no, nunca lo van a encontrar. Yo solo fui a una fiesta”, precisó, quien indicó que toda esta denuncia es parte de la venganza de una docente que “manipula a los jóvenes”.

Se supo, que Camacho Palacios tiene una denuncia impuesta por una compañera de trabajo, que lo acusó de actos contra el pudor.