Si mañana ocurriese un , una mínima cantidad de peruanos recibiría dinero para poder reconstruir su vivienda, ya que solo el 3,5% de casas en el tiene seguro patrimonial y están cubiertas contra robos y desastres como incendios, terremotos y maremotos.

De acuerdo a los datos manejados por la , tanto en Lima como en provincias el 7,4% de los predios industriales tiene cobertura contra desastres, lo que demuestra un mayor interés de las empresas de contar con este tipo de seguros en comparación con los propietarios de las viviendas.

“No es una prioridad para las personas. Ellos consideran que primero está su salud, su vida, su vehículo, y después viene el seguro de las casas, porque ven muy remoto que ocurra un sismo”, aseveró Aldo Labó Verdeguer, subgerente de Suscripción de Riegos Patrimoniales de Seguros Rímac.

Reveló sin embargo que durante los meses posteriores a los terremotos de Ica (2007) y de Japón (2011), las ventas de pólizas para asegurar las viviendas experimentaron un alza considerable ante el temor de la gente, “pero cuando baja el temor, bajan las ventas también. Eso es algo temporal”.

“Asegurar un departamento de 100,000 dólares puede costar 250 dólares anuales. Son 20 dólares mensuales. En cambio un auto es asegurado con una póliza de 800 dólares anuales”, agregó, recalcando que este tipo de seguros, denominados de incendio a todo riesgo, que cubre incendios, daños por huelgas, terrorismo, lluvias, inundación, maremoto, terremoto, “es más barato que asegurar un auto, porque éste último es más propenso a los siniestros”.

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