Atorarse con una canchita podría sucederle a cualquiera. Al pequeño Yosmel Anticona de 6 años le ocurrió el último viernes cuando cenaba junto a su familia en su casa en la localidad de Moche, en La Libertad. El menor bromeaba con su hermana cuando se rió mientras comía la cancha y un pequeño pedazo le entró por la tráquea.

“Comió la cancha y se empezó a ahogar. Desesperado, se empezó a poner morado y se tiró al suelo. En ese momento no sabíamos pero al llegar al seguro nos dijeron que la cancha se había ido por la vía respiratoria”, contó uno de sus familiares a las cámaras del noticiero de Latina.

Las horas siguientes fueron terribles para el pequeño Yosmel. En ningún hospital ni clínica de la región había un fibrobroncoscopio para poder extraerle el cuerpo extraño que estaba alojado en el pulmón. El sábado por la noche fue llevado en ambulancia hasta Lima y el domingo fue intervenido en el Hospital de Emergencias Pediátricas.

El pequeño Yosmel pasó dos días con la cancha obstruyendole la vía respiratoria. Actualmente se encuentra en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Almenára. “Ya le retiraron el ventilador mecánico, está solo con el oxígeno, pero aún se mantendrá en la unidad de cuidado intensivos unos dos o tres días más”, contó otros de sus familiares a Latina.

Los padres de Yosmel esperan que el hospital contribuya con su pronta recuperación para poder regresar a su tierra y recuperar la tranquilidad.

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