De “persecución política” ha calificado el presidente regional de Áncash, César Álvarez, el anuncio que acaba de efectuar el procurador público anticorrupción, Christian Salas, al considerar que el caso ‘la Centralita’ ya fue investigado y que incluso ha tenido que ver un hábeas corpus que le protege de este tipo de situaciones, y dijo que debe respetarse el debido proceso.

“Basta ya de meterse con mi familia, de estar causando toda una conmoción innecesaria cuando este asunto ya está superado”, han sido las primeras declaraciones que ha efectuado el presidente regional de Áncash.

Él dio tales declaraciones desde Huaraz, en donde reveló que se ha reunido con sus funcionarios, ha recibido a una primera delegación de auditores de la Contraloría General de la República.

También anunció también que el viernes estará presente en el Congreso de la República para solicitar información relacionada a las denuncias que ha recibido en su contra.

La Procuraduría Anticorrupción pidió al Ministerio Público de Áncash la detención preventiva de César Álvarez, por sus presuntos nexos con el caso ‘La Centralita’. Durante su visita a Áncash, el procurador Salas dijo que encontró graves negligencias en las investigaciones realizadas por varios fiscales sobre este caso en particular y anunció que uno de ellos será denunciado.