Rebeca Palomino, quien fue camarera del crucero Costa Concordia y sobrevivió al naufragio, reveló que “ella vio como su amiga Erika Soria se ahogaba”.
Aún nerviosa por la terrible experiencia que le tocó vivir y de la cual milagrosamente salió ilesa, cuenta que cuando ella todavía estaba a bordo de la embarcación vio que el bote inflable, al que había subido Erika Soria Medina se volcó por el sobrepeso.
“Todos fueron rescatados menos ella. Yo le dije que no subiera, pero Erika estaba demasiado nerviosa, quizás entró en pánico y no pudo nadar para sobrevivir”, aseguró en entrevista a diario Ojo.
Recordó que ese mismo día conversó con la chica ahora desaparecida y quedaron en salir a bailar, pues iba a haber una fiesta en el salón de baile en el crucero. “Con otras chicas peruanas nos compramos ropa para la celebración, pero no se realizó porque el barco naufragó”, dijo visiblemente llorosa.
Asimismo, confirmó al igual que los otros sobrevivientes, que la tripulación recién avisó a los viajeros de la emergencia una hora después del impacto.
“Nadie hubiera muerto sin nos hubieran avisado a tiempo. Nos decían que ya estaba controlado, pero para ese entonces el capitán ya no estaba”, narró con los ojos llorosos al recordar lo vivido.