Según los informes del investigador, se trata de soldados chilenos que acamparon en el centro ceremonial y que habrían sido envenenados por la persona que les daba de comer.

En las excavaciones también se lograron encontrar 32 restos óseos, los que fueron enterrados a suelo mínimo, con los brazos cruzados y desnudos.

Estos importantes anuncios se hicieron durante la presentación del libro “Proyecto de Investigación y Conservación Arqueológica de Chavín de Huántar”, donde estuvo presente el viceministro de Cultura del Perú, Rafael Varón Gabal.