Mostrando un carácter altanero y burlón, fingió ser una chica atrapada a causa de una “injusta confusión” y aseguró ser inocente.

“Tú sabes que la plata es siempre la que manda. (…) Yo voy a hacer todo para irme a la calle y me van a ver paseándome igual. Que yo sepa me han sembrado, no tenía ni mier… en el cuerpo. Yo soy una niña buena, no me meto con nadie, jamás mataría a nadie”, enfatizó.

Ella se burla de su propia actuación y estalla en una sonora carcajada. Cuando las preguntas la acorralan y no sabe qué decir, niega lo que acababa de aceptar. Entra en contradicciones, pero no le importa.

Además, en referencia a su pandilla, los Mara Salvatrucha, ella dice que son su verdadera familia. “Ellos son mis hermanos, me quieren mucho y me tratan bien”, puntualizó.

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