Los vendedores del terminal pesquero de Villa María del Triunfo se han visto obligados a bajar los precios tras la alerta sanitaria de Digesa, que recomendó no consumir pescados tras la muerte de 4.450 pelícanos a lo largo de nuestro litoral. La alerta originó una ola de temor y desinformación que perjudicó a los que viven del mar.

Las ventas al por mayor de especies marinas han caído en 50%, mientras que la afluencia diaria de compradores ha bajado de 700 a 200 personas, afirma Humberto Pozo, consultor en aseguramiento de la calidad del ese terminal.

Él culpó a las autoridades de desinformar a la gente al asegurar que los pescados tenían bacterias y virus mortales.

“El pescado es un alimento sano, los consumidores no deben tener miedo, pues los pelícanos no han muerto por comer un atún o un lenguado. El control de calidad de los productos que aquí se ofertan está garantizado”, aseguró, tras indicar que se ha dejado de vender al público 130 toneladas de productos marinos al día (bajó de 260 a 130 TM).

Pozo exigió a las autoridades (Ministerio de la Producción y de Salud) se pronuncien oficialmente y desmientan que existen amenazas por el consumo de productos ictiológicos. “Nos han mentido”, lamentó.

Desde los pescados populares hasta los más finos han bajado de precio para incentivar el consumo en el Terminal Pesquero. La merluza, por ejemplo, que costaba 18 soles el kilo, ahora se oferta a solo 10 soles. El congrio ha bajado de 20 a 16 soles el kilo. El kilo de mero está normalmente 30 soles, pero lo están ofertando a 26 soles. El kilo de lenguado dorado lo venden a 16 soles, cuando hace una semana costaba 40 soles el kilo. La venta de mariscos también disminuyó.

El panorama en el Terminal Pesquero de Ventanilla no es distinto. Wilder Tisnado, jefe de control de calidad de este terminal, afirmó que en ese lugar las ventas también han bajado entre 40 y 50%.

Fuente: La República