José Leandro Reaño Cabrejos arrojó a su expareja Marita Alpaca Raa, su expareja, desde una habitación del piso 19 del Hotel Sheraton la mañana del 19 de agosto de 1990, un crimen que conmovió a la ciudadanía en ese entonces. Desde que salió de prisión en 1998, el exgerente del Banco de Comercio hizo correr el rumor de que había fallecido de un cáncer terminal.

Su propósito fue el de dejar pagar la reparación civil de 200 mil soles a Corina Raa, madre de Marita. A él le sentenciaron en 1995 por el delito de homicidio simple y al pago de esa cantidad, pero sólo entregó 120 mil y estuvo tres años en la cárcel. Salió con beneficios penitenciarios.

Una de las cosas que llamó la atención del crimen es que Marita estuvo embarazada y, según Corina Raa, Reaño le obligó a abortar. “Su útero nunca fue encontrado cuando exhumaron el cuerpo”, relató al semanario Hildebrandt en sus Trece.

Ahora, Reaño tiene 63 años y vive en el hostal El Reducto, en Miraflores, y todas las tardes camina por los parques aledaños, según un vecino. El lunes pasado, a las 16:30, Reaño salió del hostal en la cuadra 7 de la avenida Ricardo Palma y fue abordado por reporteros del semanario citado.

“¿Por qué no cumple con pagar la reparación civil por el crimen de Marita?”, le preguntó la periodista. No dijo nada y, con señas, le indicó a un agente de seguridad que saque a los periodistas del lugar, pero no le hace caso. Regresó al hostal fastidiado.

El exabogado de Reaño, Mario Amoretti, aseguró al semanario que es imposible que regrese al penal porque el caso está archivado. “Los agraviados debieron exigir el pago hace mucho tiempo, pero lo dejaron pasar”, señaló.

Los peritos de la División de Homicidios hicieron un atestado policial en el que señalaban que Marita se suicidó, pero la investigación de la Fiscalía estableció que había sido asesinada. Se acreditó que los empleados del Sheraton y los agentes alteraron y distorsionaron los hechos y borraron las huellas de la escena del crimen.

Fuente: Hildebrandt en sus Trece