Se viene Semana Santa y miles de personas realizarán viajes y campamentos en zonas alejadas de la capital, exponiéndose a las mordeduras de diversas criaturas salvajes y venenosas, sobre todo arañas y serpientes.

Walter Silva, especialista del Serpentario o Centro de Producción de Biológicos del Instituto Nacional de Salud (INS), detalló que los viajeros deben verificar muy bien las zonas en donde acamparán, así como realizar la limpieza necesaria.

“Si hay presencia de arañas, buscar otra zona. Por lo general, estos animales (las loxósceles laeta o arañas caseras) se esconden debajo de las piedras. Ahí harán sus nidos y guaridas. Este animal es potencialmente peligroso”, declaró Silva.

La mordedura de la loxósceles laeta produce inflamación, dolor orgánico, fiebre, náuseas, y vómitos. “Hay compromiso sistémico. Conforme pasan las horas, si la persona no tiene tratamiento, habrá destrucción del tejido, complicaciones, problemas de insuficiencia renal e incluso su muerte”.

Estos especímenes se encuentran en los valles de Lima, Lurín, Chosica, Arequipa, Chiclayo y Trujillo.

Pero las personas no deben cuidarse solamente de estas arañas, sino también de los escorpiones y alacranes, que también habitan en esas zonas.

La viuda negra, que posee un veneno potente, aunque no tanto como el de la loxósceles laeta, también se encuentra en esas zonas.

Cuidado con las serpientes

Las personas también deben cuidarse de las serpientes. La mayoría de especies venenosas se encuentran en la selva peruana. Sin embargo, en Lima, Ica, Arequipa, algunas zonas de Áncash y Trujillo uno puede toparse con la venenosa jergón, conocida comúnmente como sancarranca.

Consejos para aquellos que se van de campamento en zonas alejadas

El especialista explicó que los viajeros deben elegir con cuidado la zona en donde van a acampar.

Ellos deben retirar toda la maleza, piedras u hojas secas. Es preferible no pernoctar o estar muy cerca de cuevas o formaciones rocosas.

Además, es necesario mantener las carpas cerradas. “Muchas personas salen a hacer caminatas nocturnas y dejan abiertas las carpas y ahí es donde las serpientes aprovechan para ingresar”, comentó.

Otra recomendación que da Silva es sacudir el sleeping, la ropa y todo lo que los viajeros dejan dentro de la carpa, porque son lugares en donde los animales (arañas o serpientes) pueden escabullirse.

Si las personas van a realizar caminatas nocturnas, es muy necesario llevar linternas, así como un bastón o palo para ir golpeando el lugar donde uno pisa para que, al sentir las vibraciones, estos animales huyan.

Qué hacer si encuentras una serpiente en la carpa

“Mantener la calma. Luego, conseguir un bastón o un palo y tratar de ahuyentar al animal dándole un pequeño toque. No es necesario golpearlo o maltratarlo, solamente tocarlo para que sienta el palo y así salga de nuestra carpa. Con mucho cuidado. Jamás intentar agarrarla porque uno no sabe si es venenosa o no”, puntualizó Walter Silva.

Por: Gustavo Muñoz (@Gustavo_MP)