Vásquez Mori lloró ante los investigadores de la Policía y el representante del Ministerio Público al narrar el supuesto paro cardíaco que sufrió la víctima, Enrique Armestar Anci, hasta el momento en que decidió descuartizarlo.

Los familiares y amigos de la víctima que permanecieron por los alrededores del condominio de Breña rompieron en llanto, mientras que algunos vecinos que lo reconocieron y le gritaron: “¡Asesino!, ¡asesino!”

La Policía confirmó que el cadáver de Armestar fue desmembrado en la sala, luego de la prueba de Luminol. Tras ello, Vásquez fue llevado por La Victoria hasta el puente Balta, que cruza el río Rímac, donde arrojó algunos restos.

Finalmente, Vásquez Mori también reveló que viajó a Huacho para abandonar una maleta con la pelvis de la víctima, y que dejó la cabeza en el jardín de un mausoleo en el cementerio El Ángel, en Barrios Altos.