Las primeras pericias de los agentes de la División de Homicidios de la DIRINCRI dan cuenta que los delincuentes ingresaron al inmueble pasadas las 3:00 a.m. para luego neutralizar a Emerson Domínguez Obregón, encargado de recepción.

Según informó el diario ‘El Comercio’, a Torres Roncalla lo llevaron a la habitación 101, donde fue sujetado con grilletes y luego masacrado a golpes. Se investiga qué información exigían al empresario en ese momento o si se trató de una venganza.

Lo que sí se confirmó fue que la víctima fue rociada con gasolina y calcinada. La teoría de la venganza se refuerza en que los homicidas fugaron sin robar nada. Torres había llegado de EE.UU. hace cuatro años con un capital que invirtió en el negocio hotelero.

Según informaron agentes a cargo del caso, el occiso administraba hostales en San Martín de Porres, La Molina y Ate Vitarte. Sus restos serán velados en uno de sus locales y luego recibirán cristiana sepultura en un cementerio de la capital.

En tanto, se supo que Giovani Torres Narváez, quien murió atropellado en la cuadra 9 de la avenida Alfredo Mendiola, en el distrito de San Martín de Porres, era sobrino del empresario hotelero. Ambos cuerpos permanecen en la Morgue de Lima.

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