El jefe de la Dirincri, general César Cortijo, mostró un chaleco antibalas que le salvó la vida a un mayor durante la intervención que terminó con la muerte de Lindomar Hernández Jiménez, asesino confeso de Luis Choy, y Edgar Eduardo Lucano.

El equipo presentaba dos impactos de bala en el pecho y evitó que el agente de la Policía fuese herido de muerte debido a que los delincuentes usaban armas de largo alcance.

En conferencia de prensa, el jefe policial detalló que los fugitivos habían coordinado con otros delincuentes para este martes realizar un asalto, exactamente a las 10:45 horas.

Los hampones planeaban asaltar la agencia del Banco del Crédito del Perú (BCP) que se encuentra en la Av. Túpac Amaru, en Comas.

Lo peor de todo es que la citada agencia bancaria se encuentra frente al colegio Fe y Alegría y sobre ella, en el segundo piso, funciona un nido para niños.

Sobre el material incautado a los delincuentes, se detalló que hay una granada de guerra, tres pistolas de 9 milímetros, dos revólveres calibre 38, además de una bolsa aparentemente de marihuana y 40 quetes de PBC.