Un estudio realizado por la Organización Internacional del Trabajo (OIT), asegura que durante el segundo trimestre de 2020 a causa de la pandemia de la COVID-19 los ingresos de los trabajadores se redujeron en 3,5 billones de dólares, así como la pérdida de horas de trabajo reflejadas en 495 millones de empleos, donde destaca al Perú como uno de los casos más críticos.

Este sexto informe sobre los efectos del coronavirus en el mercado laboral mundial, empeora las cifras del anterior estudio de junio, en el que la pérdida de empleos equivalente se había cifrado en 400 millones, siempre comparando con cifras del año anterior (2019).

Los 495 millones ahora calculados, que suponen una pérdida del 17,3 por ciento de las horas de trabajo, podrían moderarse en el tercer y cuarto trimestre, pero la OIT prevé en esos periodos descensos equivalentes a 345 y 245 millones de empleos respectivamente.

	La OIT revela que el mayor índice de desempleo se dio entre los meses de abril y junio. (Foto: EFE)
La OIT revela que el mayor índice de desempleo se dio entre los meses de abril y junio. (Foto: EFE)

Latinoamérica, la más golpeada

El principal motivo de los cálculos más pesimistas, según la OIT, es la situación de las economías en desarrollo y emergentes, en particular en el sector informal, que se ha visto seriamente afectado por la pandemia que otras actividades económicas.

El informe de la OIT detalla que Latinoamérica es la más perjudicada en términos relativos. Con una pérdida de horas de trabajo en el segundo trimestre del 33,5 por ciento (que equivale a 80 millones de empleos) que seguirá siendo alta en el tercero, hasta el 25,6 por ciento (60 millones de empleos).

Sin embargo, en términos absolutos, la mayor pérdida de horas de trabajo se dio en el sur de Asia, donde equivalió a 170 millones de empleos en el segundo trimestre y aún llegará a 115 millones en el tercero de acuerdo con las previsiones del organismo.

La OIT no dio información pormenorizada de cada país, pero sí destacó que la pérdida de horas de empleo en España ha rondado el 6 por ciento. En países como Estados Unidos o Brasil llegó al 10 por ciento y en muchas naciones latinoamericanas (México, Chile, Ecuador, Colombia, Costa Rica) estuvo en la banda del 20 por ciento.

Más dramático fue el caso de Perú, uno de los países con más casos de COVID-19 en el planeta y con un alto predominio del empleo informal, donde se calcula que la pérdida interanual de horas de trabajo superó el 50 por ciento entre abril y junio.

	La economía informal en Latinoamérica ha sido la más afectada con la llegada de la pandemia en la región. (Foto: EFE)
La economía informal en Latinoamérica ha sido la más afectada con la llegada de la pandemia en la región. (Foto: EFE)

Caída en ingresos

Todas estas pérdidas en horas de trabajo se tradujeron en el mencionado descenso global en los ingresos laborales de 3,5 billones de dólares (un 10,7 por ciento interanual).

De acuerdo al estudio de la mencionada organización, América es el continente más afectado por esta pérdida de ingresos, con una caída del 12,1 por ciento con respecto al mismo periodo de 2019, y los países en desarrollo también han resultado más golpeados que los ricos en este sentido, sufriendo una bajada interanual del 15,1 por ciento.

Los descensos en horas de trabajo e ingresos se han debido, principalmente, a las medidas de prevención contra la COVID-19, que supusieron especialmente durante los confinamientos masivos el cierre de muchas actividades laborales, algo que según la OIT aún afecta a la mayor parte del planeta.

Pese a que muchas medidas restrictivas se aplican de forma más leve, la organización subraya que el 94 por ciento de los trabajadores reside en países en los que aún se aplica algún tipo de limitación que afecta a los lugares de trabajo.

Asimismo, aún uno de cada tres trabajadores reside en naciones donde están cerrados todos los lugares de trabajo salvo los esenciales, recuerda el estudio.

	Algunos países aún siguen aplicando medidas para restrictivas para combatir al coronavirus. (Foto: EFE)
Algunos países aún siguen aplicando medidas para restrictivas para combatir al coronavirus. (Foto: EFE)

Medidas fiscales de choque

El informe de la OIT también analiza las medidas de incentivo fiscal ordenadas por distintos gobiernos para mitigar estos efectos adversos de la pandemia en el mercado laboral, y concluye que por cada uno por ciento del PIB utilizado en estas políticas puede lograrse un descenso del 0,8 por cien en la pérdida de empleos.

Sin embargo, estas medidas se han concentrado especialmente en los países desarrollados, debido a la limitación de recursos en los países emergentes y en desarrollo, pese a que éstos han sido más golpeados debido al predominio del empleo informal y lo mucho que éste se ha visto afectado por la crisis sanitaria.

La OIT concluye que los países en desarrollo afectados deberían invertir 982.000 millones de dólares adicionales en total para conseguir los mismos efectos paliativos de las medidas adoptadas en las naciones más ricas.

Vale recordar que durante la presentación del primer informe, el director general de la OIT, Guy Ryder comentó: “Al tiempo que redoblamos esfuerzos para vencer al virus, debemos adoptar medidas a escala lo antes posible para paliar sus efectos en los planos económico, social y laboral” y agregó: “En particular, se debe fomentar el empleo y la actividad empresarial, además de garantizar los ingresos”, sentenció.

Con información de EFE