Más de 3 mil policías y 500 serenos se encuentran en puntos claves de la capital, previamente definidos, a fin de prevenir posibles disturbios.

Los principales afectados son los pobladores que viven en zonas como Puente Nuevo, en El Agustino, y el cono sur de Lima, como Villa María del Triunfo.

En la Carretera Central también hubo restricción en la circulación de unidades. La población utilizó colectivos y camiones para trasladarse.

Asimismo, se reportó que algunos transportistas intentaron quemar llantas a la altura del kilómetro 9 de dicha arteria, en la zona de Santa Clara.