Decenas de miles de personas aclamaron el jueves al en su primer recorrido por las calles de Lima, rumbo a la sede de la Nunciatura Apostólica.

La comitiva papal, que arribó la tarde del jueves procedente de Chile, fue recibida por una multitud que ocupó todas las avenidas y calles que recorrió desde el aeropuerto internacional de Lima hasta la avenida Brasil, en el distrito costero de Magdalena del Mar.

En ese lugar, dejó el vehículo oficial y abordó por primera vez el papamóvil.

Estuvo acompañado por el arzobispo de Lima, Juan Luis Cipriani.

A lo largo de las avenidas, decenas de miles de personas con globos amarillos y blancos aclamaron al pontífice, mientras eran contenidas por agentes de la Policía Nacional desplegados para evitar que se produzca algún incidente.

El papa fue esperado en la sede de la Nunciatura, en el barrio limeño de Santa Beatriz, por miles de personas, en su mayoría jóvenes que forman parte de la llamada “Guardia Papal”, conformada para orar, cantar y vigilar la seguridad del pontífice mientras permanezca en la ciudad.

Al llegar al lugar, y ver a la multitud que lo esperaba, el papa decidió que el papamovil haga un breve recorrido para bendecir a los feligreses, entre los que destacaban muchísimos jóvenes y gran cantidad de religiosas.