Una menor de once años, al ver en televisión el caso de la pequeña Jimena, que fue violada y asesinada, reconoció a y contó que este sujeto, con engaños, también la subió a su bicicleta y evitó un terrible desenlace gracias a una salvadora casualidad: se cruzó con el vigilante de su colegio y el “monstruo de la Huayrona”, nervioso, le pidió que se baje.