Si bien la llegada de Nadine Heredia fue tranquila y aplaudida por los invitados que se encontraban en las tribunas, la primera dama casi se cae.

El pequeño accidente y casi desapercibido ocurrió cuando la esposa del presidente sube a la tribuna oficial, donde por un momento casi pierde el equilibrio.

A esta pequeña anécdota, Nadine sonrió y siguió con los saludos a los invitados especiales que se encontraban en el lugar.

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