El enamorado le puso las pastillas y cuando ella no podía resistir el dolor, visitó el consultorio del médico que asesinó a Maryorie Keiko.

“Me ponen inyección. Me quedo dormida, cuando me levanto, estaba con las piernas arriba, el doctor (…) tenía un pico de pato que puso en su mesita. Me levanté mi trusa, mi pantalón y con todas mis fuerzas me levanté, porque ni siquiera podía caminar. Para la ecografía final, me dicen que ya no hay nada. Me agarraron de tonta”, manifestó al programa ‘Punto Final’.

Carolina lo denunció, pero su hija pequeña se puso mal, por lo que no les quedó otra que regresar al médico, que les daba medicinas gratis, pero este la volvió a engañar.

Le hizo firmar papeles en blanco que han sido usados por un abogado que ella no conoce para limpiar la honra de Ángel Valdivia.

“La verdad es que tengo mucho miedo. Ha sido capaz de matar a Maryorie y puede hacerlo conmigo también. Yo sé que si le dejan libre me pasará lo mismo”, enfatizó.