La violencia infantil por padres, madres, parientes o empleadas del hogar sigue siendo un riesgo para las familias. Según el último estudio del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP), en lo que va del 2016 se registran 3,662 denuncias de violencia infantil, física y psicológica.

Además, el Fondo para la Infancia de las Naciones Unidas (Unicef), señala que diariamente muchos niños y niñas en el Perú son , pero sólo un porcentaje de los afectados hacen denuncias.

“Cuando los niños son menores de cuatro años es muy difícil que informen a los familiares sobre lo sucedido. Por eso, los padres deben estar alerta y verificar si la persona que está al cuidado de ellos es la indicada. Actualmente existen dispositivos tecnológicos que permiten observar la vivienda desde cualquier lugar donde nos encontremos”, precisó el especialista de Verisure, Eduardo Alcérreca.

“El monitoreo de seguridad debe estar acompañado de imágenes y audio en tiempo real. Solo de esta manera podremos denunciar con pruebas el maltrato infantil y estar seguros que el problema se erradique”, enfatizó.

La tecnología, a través de la videovigilancia, le brinda la oportunidad a la madre de familia, de observar desde su celular lo que está sucediendo en su domicilio y tener el control total de la situación.

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