Según contaron Iván Vicente y Shirley Guerra, ambos la perdieron de vista durante cinco minutos, tras lo cual la buscaron por todos los rincones de su casa y luego la hallaron muerta y sin ropa a más de 300 metros del inmueble.

“No me explico cómo mi niña haya ido hacia un lugar donde ya no había luz. Ella no iba hacia la oscuridad sola. Hay montículos de tierra que no me explico cómo ella pudo atravesar”, contó el padre de la pequeña a ‘América Noticias’.

“Mi hija estaba despojada de todas sus prendas. No fueron los perros, porque no tenían roturas ni habían sido arrancadas. Su pantalón y su trusa estaban juntos”, añadió Iván Vicente, quien dijo que vio a una persona sospechosa entre los árboles.

Incluso, la abuela de la menor, Inocenta Asín Cama, contó al diario ‘Trome’ que la pequeña tenía la cabeza rota por un golpe con un ladrillo. La necropsia de ley arrojó que la niña falleció por asfixia mecánica y obstrucción de las vías respiratorias por la mordedura de los perros.

La investigación pasó a la Dirección de Investigación Criminal (DIRINCRI) junto con los seis perros, quienes podrían ser sacrificados en las próximas horas.