A las 5 de la tarde dos empadronadores, un joven y una señorita, ingresaron a un condominio en Lince con 16 padrones vacíos y uno a medio llenar y los dejaron en la recepción, asegurando que personal del INEI lo recogería más tarde, pero nadie ha reclamado las cédulas aún. La cámara de seguridad los grabó saliendo del edificio abrazados.