Nuevos detalles salen a la luz respecto al ciudadano libanés Muamad Amadar, quien fue detenido el último martes en su casa de Surquillo luego que la Policía encontrara gran cantidad de desechos explosivos en su basura.

Según se supo, el sujeto había adquirido y almacenado material químico para la elaboración de artefactos explosivos.

Así también lo refiere la periodista Cecilia Valenzuela en su columna publicada en el diario El Comercio, donde precisa que los agentes que lo intervinieron encontraron en las bolsas de basura de su casa restos de detonantes, dinamita y pólvora negra.

“En los últimos días, la policía encontró en la basura de Amadar huellas de los envíos de dinero que recibía a través de Western Union; pero también halló restos de carbón, guantes de látex tiznados de negro, botellas con restos de líquido que contenían rastros de TNT y rasgos de pólvora negra. Todos los ingredientes para hacer una potente y mortífera bomba”, dice el artículo.

También hace referencia a un caso ocurrido hace 20 años atrás en Argentina, donde el grupo terrorista Hezbolá estacionó un volquete cargado de explosivos fabricados, “con los mismos ingredientes que estuvo manipulando Amadar hasta ayer en Lima”, y lo hizo detonar en el Centro Comunitario Judío-AMIA en Buenos Aires, causando la muerte de más de 80 personas.

Mientras todas estas teorías surgen, el ciudadano libanés continúa detenido y es interrogado por las autoridades para esclarecer sus verdaderos nexos con el grupo terrorista.

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