Estados Unidos y México son los primeros países desde donde Perú repatriará ciudadanos que se quedaron sin poder retornar al país tras el cierre de fronteras en vigor desde este martes contra la propagación del , declarado pandemia por la Organización Mundial de la Salud (OMS).

El presidente de Perú, , explicó en una conferencia de prensa para actualizar la situación tras la proclamación el domingo pasado del que estos vuelos traerán a Lima a peruanos y también sacarán de Perú a estadounidenses y mexicanos que se quedaron sin poder salir del país.

“Ya está viniendo el primer vuelo de Estados Unidos y llega en la tarde. Estos peruanos han sido registrados en el consulado. También hay estadounidenses que están aquí y con el mismo vuelo retornarán a su país. Otro requerimiento es de peruanos que están en México”, comentó Vizcarra.

En ese sentido, el secretario de Relaciones Exteriores de México, Marcelo Ebrard, había agradecido horas antes en redes sociales la comprensión y apoyo del Gobierno peruano “para facilitar el regreso de los mexicanos que están de visita en ese país hermano”.

Transporte comercial detenido

Desde la medianoche de este martes quedaron restringidos todos los vuelos comerciales en el espacio aéreo peruano, tanto internacionales como domésticos, por lo que un centenar de extranjeros que debían hacer escala en el aeropuerto de Lima se quedaron varados al quedar cancelados las conexiones que debían tomar.

Mientras no puedan ser incluidos en alguno de estos vuelos, los turistas que se encontraban en Perú están obligados a permanecer en sus hoteles para respetar el confinamiento nacional decretado desde el lunes para todos el país, donde solo se permite el tránsito para comprar alimentos de primera necesidad y fármacos.

Asimismo, una nueva norma publicada este martes en el diario oficial El Peruano enfatizó que los peruanos repatriados en estos vuelos deberán guardar el periodo de aislamiento social en sus lugares de residencia hasta descartar que no tienen el COVID-19.

Optimismo con aislamiento

Durante su última comparecencia, Vizcarra manifestó su optimismo en que el aislamiento obligatorio no se prorrogará más allá de los quince días decretados desde el lunes, después de que en el segundo día de esta medida extrema haya comprobado que la población la ha respetado mucho más que en el primer día.

Como ejemplo de ello el presidente peruano señaló que la demanda de energía eléctrica se redujo a la mitad de un día laborable cualquiera.

“Nosotros creemos que, en la medida en que cumplamos bien el estado de emergencia, quince días serán suficientes. Eso es lo que dicen los expertos. Con ese tiempo cortamos la transmisión del virus o la hacemos tan lenta que es controlable”, indicó Vizcarra.

“Si no logramos que la gente esté en sus casas, la curva de contagios seguirá en aumento, con consecuencias graves para la población y muchas pérdidas de vidas humanas. Este esfuerzo es precisamente para evitar esto, y lo estamos haciendo bien, sin escatimar”, añadió.

	Vizcarra manifestó su optimismo en que el aislamiento obligatorio no se prorrogará más allá de los quince días decretados. (Foto: EFE)
Vizcarra manifestó su optimismo en que el aislamiento obligatorio no se prorrogará más allá de los quince días decretados. (Foto: EFE)

Sigue creciendo el número de infectados

El mandatario recordó que hasta el momento han sido confirmados 117 casos de coronavirus en el país y valoró que apenas tres requieran ventilación mecánica en una unidad de cuidados intensivos.

Sin embargo, advirtió que si Perú llegase a los niveles de propagación de la enfermedad de Italia y España, donde los casos se cuentan por miles y las defunciones por centenares, la capacidad hospitalaria de Perú para atender los casos más graves se vería sobrepasada.

“Estamos viendo una gran demostración de solidaridad de los peruanos, y nos está haciendo reflexionar sobre de actitudes no muy convenientes como sociedad. Quizás el individualismo y el egoísmo nos ha llevado a este tipo de circunstancias. La propia naturaleza nos está haciendo reflexionar y obligando a un cambio de actitud que no debe de ser de quince días, sino permanente”, concluyó. EFE