Al igual que otros sujetos que hoy tienen problemas legales muy serios, a Gerald Oropeza, prófugo empresario investigado por sus presuntos nexos con el narcotráfico, también le gustaba tomarse fotografías con varios fajos de dinero.

Así lo muestra una publicación del diario La República, que recogió las fotografías y las comparó con las tomadas con algunos mafiosos.

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Además se replica el testimonio de un testigo clave del caso: Luis Acuña Pomar, amigo íntimo de Oropeza, quien estuvo junto a él en su Porsche cuando fue atacado con granadas y balazos por sicarios liderados por Jhairol Torres.

Las declaraciones de Acuña Pomar contó detalles de los minutos posteriores al atentado y cómo se manejó la atención médica a Carlos Sulca, mano derecha de ‘Cara Cortada’.

Como se recuerda, desde aquel día, el empresario se mantiene en la clandestinidad.