Humberto Lay no solo es un congresista, también es un papá que disfruta de su tiempo con sus hijos. En su ajustada agenda de trabajo se hace un espacio para compartir momentos con ellos.

Su vida ha cambiado desde que es congresista. Tiene menos tiempo para compartir gratos momentos familiares, pero afirma que su trabajo es el mejor legado que les deja a sus hijos*. Apuesta, asimismo, por lo valores, como la honestidad y el respeto, para impartirlos en su familia y en la política.

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Tiene una hija que ya ingresó a la política y su hijo mayor le sigue los pasos como periodista; sin embargo, espera que algunos de los menores pueda interesarse por el derecho. Él es abogado especialista en derecho penal.

Lay asegura no tener pasatiempos, contó que para ocupado en el trabajo.

Lay asegura no tener pasatiempos, debido a que su trabajo en el Congreso ocupa todas sus horas. Recuerda que cuando era joven jugaba mucho ping-pong. Actualmente gusta de la lectura y la música clásica.

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Cuenta que ha heredado de su padre el gusto por la lectura y la pasión por realizar con excelencia todo trabajo. En este Día del Padre Humberto Lay y su esposa Cristina lo celebraran en unión familiar en compañía de sus cinco hijos, nietos y su primer bisnieto.

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