Paro cardiaco, pérdida de conciencia, convulsiones, daño cerebral y hasta la muerte puede ocurrir con las víctimas del cogoteo.
Al comprimir el cuello con el brazo se puede ocasionar daños graves a la tráquea y causar el deceso por asfixia, señaló Víctor Gonzáles, médico cirujano del Hospital Sisol Camaná.
El experto explicó que al comprimir las arterias carótidas (a la altura del cuello) se impide la irrigación sanguínea al cerebro, lo que hace que la persona se desmaye luego de uno o dos minutos de compresión.
“Si la presión persiste, podría provocar una lesión a nivel de la tráquea, ésta puede hundirse y producir sangrado interno (hemorragia), y el paciente puede fallecer”, puntualizó el especialista.
Si una persona es testigo de un cogoteo y ve que la víctima ha perdido la conciencia, lo primero que debe hacer es aportar oxígeno a través de un masaje cardíaco o respiración boca a boca para, de esa manera, salvarle la vida, advirtió.
El problema principal en estos casos de asalto delincuencial es la falta de oxígeno, lo que puede derivar en un paro respiratorio y posteriormente en un paro cardíaco.
“Dependiendo del tiempo de compresión del cuello, la persona puede llegar a convulsionar y causar daño cerebral o dejar una lesión permanente y derivar en algún tipo de retardo mental”, manifestó finalmente el galeno.
Fuente: Andina.