Un obrero murió esta tarde sepultado por una pared cuando trabajaba en el interior de una vivienda ubicada en el asentamiento humano San Genaro, Chorrillos.

El hecho ocurrió cuando Gabriel Salazar (38) cavaba una zanja y de pronto un muro de la casa contigua se le vino encima y que aparentemente se desplomó debido a que no contaba con los cimientos necesarios.

El fiscal de turno llegó hasta el lugar y ordenó el levantamiento del cadáver para que se le practiquen los exámenes de ley.